En ocasiones, después de una extracción dental, se pueden experimentar diferentes síntomas desagradables como dolor, inflamación, sangrado o incluso dolor de oído. Esto sucede cuando la extracción de un diente afecta la salud de los nervios del oído. La extracción dental involucra la remoción de un diente de la boca. Esto puede ser necesario por varias razones, desde la prevención de enfermedades periodontales, el cuidado de la higiene dental, la preparación para una cirugía dental, hasta el alivio del dolor. Cuando un diente es removido, el hueso alrededor del diente debe ser raspado para poder extraer el diente completamente. Esto puede causar un daño a los nervios del oído. Si los nervios se dañan durante la extracción, pueden provocar un dolor de oído intenso.
El dolor de oído provocado por la extracción dental es una condición comúnmente conocida como neuralgia del trigémino. Esta afección provoca un dolor intenso en el oído, la cara y la boca. El dolor puede ser agudo, punzante, quemante o de hormigueo. El dolor puede variar en intensidad, desde un leve molestia hasta un dolor insoportable. El dolor puede durar desde unos minutos hasta varias horas. La neuralgia del trigémino es una afección crónica, pero a veces los síntomas se pueden controlar con medicamentos o una terapia física.
Además de la neuralgia del trigémino, la extracción dental puede provocar otros síntomas como:
- Dolor facial
- Hinchazón
- Inflamación
- Dificultad para hablar o masticar
- Sensibilidad al frío o calor
- Dolor de cabeza
- Mareos
- Náuseas
Los síntomas pueden presentarse inmediatamente después de la extracción o pueden tardar varios días en aparecer. Si estos síntomas persisten, se recomienda consultar al dentista para recibir un tratamiento adecuado. El tratamiento puede incluir medicamentos para el dolor, como el ibuprofeno, para reducir el dolor y la inflamación; y medicamentos para la neuralgia del trigémino, como el carbamazepina. También hay algunos tratamientos alternativos, como la acupuntura, que pueden ayudar a aliviar el dolor.
En general, la extracción dental es un procedimiento seguro que raramente provoca complicaciones. Sin embargo, los pacientes deben saber que pueden presentar algunos efectos secundarios después de la extracción. Si se sienten algunos síntomas desagradables, como dolor de oído, es importante consultar al dentista para recibir un tratamiento adecuado.
¿Qué es una muela y cómo se extrae?
Una muela es una de las cuatro principales piezas de los dientes de una persona. Son conocidos como los dientes posteriores y se encuentran en la parte trasera de la boca. Las muelas son los dientes más grandes y tienen una forma cónica. Están cubiertos con una capa externa dura llamada esmalte, que protege el tejido blando de debajo.
Aunque las muelas son parte de la dentadura normal, a veces necesitan ser extraídas. Esto puede ser necesario si una muela está rota, dañada o enferma. Las infecciones en las muelas suelen requerir la extracción para evitar que la infección se propague a otras partes del cuerpo. La extracción de muelas también se utiliza para acomodar las muelas restantes si hay demasiadas en la boca.
La extracción de muelas generalmente se realiza en el consultorio del dentista por un cirujano dentista con experiencia. El procedimiento comienza con la administración de anestesia local para adormecer la muela y la zona circundante. Después, el dentista usa una herramienta especial para sujetar la muela y extraerla. Esta herramienta se conoce como una prensa de alambre. El dentista también puede necesitar utilizar una sierra dental para ayudar a separar la muela de los huesos y los tejidos circundantes.
¿Por qué me duele el oído después de la extracción de muelas?
Es normal experimentar dolor e incomodidad después de la extracción de muelas. Esto se debe a que el área se inflama y puede ser extremadamente sensible. El dolor puede durar hasta un par de días después de la cirugía y puede ser más intenso durante los primeros días.
En algunos casos, el dolor de la extracción de muelas puede extenderse a la oreja. Esto es especialmente común si la muela fue extraída de la parte superior de la boca, cerca de la oreja. Esto se conoce comúnmente como «efecto oído», y puede durar varios días o incluso semanas después de la cirugía.
Los síntomas del efecto oído pueden incluir dolor, presión, entumecimiento, picazón o incluso un zumbido en el oído. También pueden aparecer secreción, dificultad para masticar o hablar, o un ruido sordo o silbido. Además, algunas personas también pueden experimentar una sensación de presión en el oído. Esto puede ser desagradable, pero no es motivo de preocupación.
El dolor de un efecto oído generalmente no requiere un tratamiento especial, pero el dentista puede recomendar un analgésico para aliviar la incomodidad. En algunos casos, el médico también puede recomendar un tratamiento antibiótico para tratar cualquier infección que pueda estar presente. Si los síntomas no desaparecen en un plazo de uno o dos días, es posible que sea necesario un tratamiento más agresivo.
Es importante que visite a su dentista regularmente para que los problemas dentales no empeoren. Si su dolor de oído persiste y es el resultado de la extracción de la muela, consulte a su dentista para evaluar el problema y obtener el tratamiento apropiado. Si el dolor no es el resultado de la extracción de la muela, se recomienda una consulta con un otorrinolaringólogo para determinar la causa y recibir el tratamiento adecuado.